Blogia
Consuelo García del Cid Guerra

RISTO MEJIDE: EL JUEZ DE LA FAMA Y UN HOMBRE SIN PIEDAD

“No creo en los favoritos sino en los supervivientes”, es una de las frases sarcásticas de Risto Mejide, dirigida al concursante de turno de “Operación Triunfo”. “Proyecto de marine espasmódico con plumas de pavo real”.

“Cuando te veo cantar veo que haces unos gestos como si estuvieras estreñido

y me preocupa tu salud intestinal, ya no te voy a llamar sobradito de oro porque se que te molesta”.

Nunca he seguido el programa pero le sigo a el. No creo que este interpretando papel alguno : Dice lo que piensa. Es el verdugo/jurado necesario. Bestia, mordaz, ofensivo y brutal. Es inteligente y sabe que con su dureza puede obtener reacciones. Los “triunfitos” esperan su minuto de gloria y se les conceden horas, días y hasta vivienda para que aprendan a cantar y a desenvolverse en un escenario. Estilistas, profesores y demás ayudantes a su servicio y con plena dedicación. Demasiado jóvenes.

Risto es un jefe malo que saca cosas buenas. El privilegio de los concursantes, que actúan ante cientos o miles de personas, adquiere conciencia de una realidad dura, pero con escenario. Maquillaje, vestuario, luces, orquesta…lo que siempre soñaron pero sin dar la talla del todo. El les hace llegar al todo y al final.

“Tu actuación no me preocupa demasiado, esta por encima de tu compañero el sobradito de oro. Te quería preguntar como estas. Te veo derrumbada, con falta de autoestima, y yo te quiero ayudar .No eres hortera, no eres vulgar, tienes un potencial enorme, no eres difícil de mirar, tienes unas piernas muy bonitas y lo dejo ahí porque eres menor de edad. Quiero que me mires a las gafas y que repitas conmigo: Me llamo Silvia y tengo que ganar este concurso”.

Los concursantes cantan, pero quien tiene la voz cantante, es el.

Si leemos sus frases/sentencia, comprobamos que no solo tienen lógica sino que parten del verdadero conocimiento. Nunca habla por hablar y siempre sabe lo que dice. Anticipa la sensación de ridículo antes de que el cantante haga el ridículo en otra parte. Duele antes de que se sientan posteriormente dolidos y les enseña a golpes de sátira como defenderse. Para ellos es un parto. Para Risto, toda una responsabilidad.

Es duro porque la fama es dura. Sin embargo, no se le puede reprochar en ningún momento el hecho de “saber”. Risto Mejide sabe, y mucho.

No es que este preparado, es que esta de vuelta, y con ese equipaje prepara la salida a los que la merecen. Es juez y parte. Le importa muy poco llevarse la peor parte y resultar odioso.

“La semana pasada te llame disminuido vocal pero hoy tengo que pedirte perdón. Perdón por lo de vocal, porque tu problema esta en tu capacidad de aprendizaje. No entiendes nada de lo que se te dice. El espíritu de lucha esta muy bien pero no basta”.

“Esta noche sobre el escenario parecíais tres amigas de shopping en un centro comercial. Te has paseado como la niña mona al lado de dos menos agraciadas para ver si pillas cacho. No os fijáis en el estilo de la canción, y un estilo corresponde a una actitud determinada, y lamentablemente esta noche te vamos a pedir que cojas tus bolsas, no pases por caja y continúes en la academia”.

Una de cal y otra de arena, pero siempre con chorreo. Los aplausos son el futuro chorreo, y haz que merecerlos. Risto: Tu si que vales.

0 comentarios