ESTA TIERRA

Cuidadín, Serafín. La boca de arriero es pública y notoria. Incluso está de moda. Nos hallamos invadidos por la vulgaridad más extrema. Bombardeados a diario por las cadenas de vida alegre donde la feria se mantiene a fuerza de cotilleo, calumnia, injuria y morros varios. Miembros y miembras, cerdos y cerdas. La venta de lo íntimo

se produce en cualquier momento, puestos para la ocasión y en pos de un taloncito a noventa días que alivia sustancial.Mente una economía de guerra. Da lo mismo gimnasia que magnesia. Debe que haber. Es contagioso. Las formas externas se pierden cuando somos prisioneros de expresiones en pos de un personaje público. Va por las palabras que el alcalde de Valladolid ha dedicado a Leire Pajín. Dicen que impropias de un político. Personal.Mente, creo que impresentables para cualquier persona mínima.Mente educada. De vergüenza ajena. Y sobre esa vergüenza perdida se bordan las audencias con broche de oro. A saco, Paco. Un buen pantallazo lo dice todo. Ese impacto extremo, perfecta.Mente estudiado. Una manipulación maestra que sube y baja

nuestros nervios sensitivos. Qué país el nuestro. Algunos alcaldes dejan mucho que desear, y otros revelan sus más bajos deseos pública.Mente, haciendo de la ofensa una especialidad. Mayo nos seguirá jodiendo con las flores y este invierno se avecina muy duro. De momento, leo, atónita, una noticia que me tiene si cuidado y a la que se dedica toda una página : La pulsera magnética que lleva Leire Pajín. Y a mí qué. La relevancia de semejante estupidez me alarma. Todo es exterior. Todo es chabacano. Cutre. Tremenda.Mente vergonzante. Los espacios de supuesto entreteni.Miento y espectáculo se llevan la palma. Puede que Belén Esteban no se encuentre muy lejos del alcalde de Valladolid. Lo mismo hasta terminan siendo colegas como a la princesa del pueblo le de por presentarse a las elecciones, que todo es posible. Lo inadecuado es el trono mediático sin mediación. Las palabras ya no se las lleva el viento porque valen –casi todas- un pastón. Arriba y abajo. Izquierda y derecha. Delante, detrás. Un dos, tres, responda otra vez. Encuestas absurdas que reafirman este gran circo español, víctima de sus pequeños excesos y acusado de cincuenta mil estafas. Un nuevo gobierno mientras en cualquier momento es posible que aparezca el yerno de alguien largando vaguedades porque alguna vez se encontró cerca de quien que fue famoso durante algunos meses. La actualidad vacía, esa ausencia de corazón, la falta de razón. Condicionados por noticias extremas, llevadas a la enésima potencia, como si de un video clip se tratara. Es más que una pena. Produce rabia interior.

 

http://www.youtube.com/watch?v=WtuXMPDxrx0